Alemania invertirá 86.000 millones durante la próxima década en modernizar sus ferrocarriles

El Gobierno alemán y el operador nacional ferroviario, Deutsche Bahn, han suscrito un contrato para la modernización y renovación de la red de ferrocarriles de Alemania durante los próximos diez años, para lo que han comprometido una inversión de 86.000 millones de euros, lo que supone el mayor contrato de la historia del país germano.

El acuerdo firmado este martes por el ministro de Transportes e Infraestructura Digital de Alemania, Andreas Scheuer, el consejero delegado de Deutsche Bahn, Richard Lutz, y el director de Infraestructura de la compañía, Ronald Pofalla, en presencia del ministro alemán de Finanzas, Olaf Scholz, contempla una inversión de 62.000 millones de euros por parte del Gobierno alemán, mientras que la operadora ferroviaria aportará 24.000 millones.

De este modo, la inversión comprometida alcanza una media anual de 8.600 millones de euros para inversiones en el mantenimiento y modernización de la red ferroviaria, incluyendo la renovación de las vías y de las estaciones, así como del suministro eléctrico y del sistema de señalización, lo que supone un incremento de los recursos disponibles del 54% respecto al anterior plan.

«Firmamos el programa de modernización más ambicioso jamás realizado en Alemania», ha declarado el ministro alemán de Transporte, Andreas Scheuer, quien ha subrayado el objetivo de reforzar el servicio de ferrocarriles con una red potente y de alta calidad como base para la protección activa del clima.

Por su parte, el ministro alemán de Finanzas, Olaf Scholz, ha afirmado que «las inversiones tienen prioridad para el Gobierno federal» y ha añadido que el programa de inversión «más grande en la historia de Deutsche Bahn» establece una perspectiva de inversión a largo plazo en una movilidad ferroviaria moderna y respetuosa con el medio ambiente.

En el caso de los representantes de Deutsche Bahn, el consejero delegado de la operadora, Richard Lutz, ha defendido que las infraestructuras ferroviarias son la base, no solo del crecimiento, sino de la calidad del servicio y la puntualidad. «Con el nuevo acuerdo podemos abordar la acumulación de inversiones y modernizar la infraestructura, lo que hará que la red ferroviaria sea más robusta y confiable», ha señalado.

«Es el comienzo de una ofensiva de modernización en la red ferroviaria alemana que nunca ha existido en esta escala», ha añadido Ronald Pofalla, jefe de Infraestructuras de Deutsche Bahn, para quien el acuerdo «es una gran victoria».

VENTA DE ARRIVA

El pasado mes de diciembre, Deutsche Bahn anunció su intención de sacar a Bolsa una participación «minoritaria» de su filial Arriva en 2020, aunque en un futuro la intención es desprenderse por completo de la empresa.

«Tenemos intención de sacar Arriva a Bolsa el próximo año. Inicialmente, planeamos vender una participación minoritaria y pretendemos vender por completo nuestra parte con el tiempo», explicó entonces una portavoz de Deutsche Bahn.

En este sentido, Arriva comenzaría a negociarse en los mercados a partir de mayo, al tiempo que Deutsche Bahn vendería la totalidad de las acciones de Arriva en un plazo de tres años.

Arriva cuenta con una plantilla de 53.000 trabajadores en 14 países. El pasado mes de mayo recibió autorización por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para entrar a competir con Renfe mediante la explotación de un servicio de transporte internacional en tren convencional entre A Coruña y Oporto.